Toldos al aire

Son varias las ventajas que tiene la instalación de toldos en nuestra vivienda. A la primera y básica, la obtención de sombra, hay que añadir una importantísima: reducimos la energía solar que entra en nuestra vivienda hasta un 80%, lo cual repercute directamente en nuestra economía, pues gastamos menos en climatización. Además, al dejar de emitir CO2, somos más respetuosos con el medio ambiente.

Otra ventaja muy valorable es la de poder disfrutar de espacios abiertos en nuestra casa, aumentando el espacio habitable de nuestra vivienda.

¿Cómo elegir un toldo?

Lo primero que hemos de tener en cuenta es para dónde lo queremos, si ha de ser para ventana, balcón, terraza, jardín… Esto determinará a su vez qué tipo de sujeción habrá de tener.

En segundo lugar, el área de sombra que queremos. Para ello tendremos que considerar tanto el ancho del toldo (el paralelo con la pared) como su salida (su proyección cuando está abierto).

Y, finalmente, su autoprotección, lo que repercutirá en el tiempo que el toldo se conservará impecable. En este sentido, los más aconsejables son los toldos tipo “cofre”, que se recogen sobre sí mismos impidiendo que la suciedad y las inclemencias meteorológicas deterioren el mecanismo y las lonas.

Los hay que están dotados de sensores de viento y lluvia, de modo que ellos mismos se autoprotegen cuando detectan inclemencias del tiempo.

Cuidados del toldo

En caso de que el toldo no disponga de ese sistema de recogida automatizado, habrá que recogerlo en caso de lluvia, fuerte viento, nieve o pedrisco. Hay que tener cuidado de no forzarlo, y procurar que nada obstaculice su recogida.

Tendremos que limpiar regularmente tanto la lona como los mecanismos de recogida, mediante aspiración o, con más profundidad, con agua clara y jabón neutro, evitando, eso sí, productos químicos y abrasivos.

En resumen, con un  buen toldo podremos disfrutar más de nuestra terraza o jardín y pasaremos menos calor en el interior de nuestra casa, pues nos ayudará a regular su temperatura en verano.

Un toldo para la terraza es una manera ideal para ganar espacios exteriores y confortables.

Un toldo para la terraza es una manera ideal de ganar espacios exteriores y confortables.

Los toldos verticales actúan como si fueran una carpa, y sus aplicaciones son múltiples.

Los toldos verticales actúan como si fueran una carpa, y sus aplicaciones son múltiples.